“Dije la verdad, lo que sentía en ese momento y lo mantengo”, afirmó Diego Forlán en pleno homenaje realizado por Peñarol por aquella frase que recorrió el mundo: “los únicos escudos que besaría son los de Uruguay y Peñarol”, dicha en Madrid.
En medio de momentos turbulentos de su vida privada -sobre los que eludió, con clase, alguna pregunta-, Forlán tuvo un rato de regocijo rodeado de las Copas que engalanan el museo de Peñarol y al lado de grandes campeones como Morena, Aguirre y Pablo Forlán, su padre, cuenta el matutino uruguayo El País.
Diego recibió el carné que lo acredita como el socio 40.000. Además, otra camiseta -en Madrid recibió dos más, como mostró Ovación- una gran plaqueta y una réplica de la bandera más grande de un equipo de fútbol.
“Es increíble que justo pueda estar en el estadio en otra final de la Libertadores. En estos momentos resurgió en mí todo lo vivido en el 87. Me acuerdo que era muy chiquito y no veía nada desde la platea América porque el Centenario explotaba. Fue una noche increíble, como lo de después en Chile, y tener la oportunidad de volver a estar en el estadio en una final de Libertadores es increíble”, contó Forlán.
“Lo que vas a vivir el miércoles (mañana) con la gente de Peñarol, no te lo vas a olvidar nunca”, le avisó Aguirre. Forlán ya es socio aurinegro. Y mañana estará en el estadio.
Fotos: Gentileza Diario El País de Uruguay

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