La Bebota del reality, como nunca la viste, en una sensual producción para Ciudad ¡Mirá!

En las calles de Buenos Aires paran a Victoria Irouleguy para felicitarla y pedirle autógrafos. Y en su paso por Israel, causó tal furor que la producción de Gran Hermano 2012 confirmó que fue tentada para regresar a Tierra Santa para participar de la final del reality.

-¿Estás contenta con la relación que formaste con tu novio, Ezequiel?
-Sí, la verdad que sí. Estoy re bien y estamos súper bien. Estoy enamorada, pero estamos viendo lo del compromiso. Veremos qué onda acá afuera, porque no es lo mismo que adentro de la casa.
-¿Volverías a entrar en la casa de GH 2012?
-No.
-¿Y si te invitan a la final de Big Brother Israel, como trascendió en las últimas horas?
-Sí, me encantaría ir. Ojalá se me dé la oportunidad de poder ir a trabajar a allá, iría encantada.
-¿Cómo calificarías tu relación con Rodrigo?
-¡No me gustaba ni ahí, por Dios! Lo que pasa es que es insoportable...
-¿Qué te gustaría hacer ahora con la fama?
-Me gustaría estudiar comedia musical, actuación, prepararme para ser modelo. Voy aprovechar esto para poder trabajar.
-¿Quién querés que gane el reality y quién no quisieras que lo gane?
-Me gustaría que gane alguien de mi grupo. Y que no gane el chaqueño, Alex, porque nunca hizo nada para que lo conozcan.
-Recién hiciste una producción de fotos en la que estás preciosa. ¿Pensás hacerte algún retoque estético a futuro?
-Y... no. Ahora voy a hacer un poco de gimnasia, porque tengo dos kilos de más. Pero por ahora ninguna cirugía.
-¿Te sentías favorecida dentro de la casa?
-No, me sentía una participante más. Y actuaba como en realidad soy.
-Pero en la casa te acusaban de "molesta". ¿Sos realmente así o era una estrategia de juego?
-No era ni una estrategia de juego ni tampoco soy así. Lo hacía a propósito, para molestarlos. En algún momento sé que me quisieron molestar a mí y lo consiguieron. Y para vengarme un poquito fui molesta.
-¿Cuál fue el momento más divertido dentro de la casa?
-Me súper divertí, en todos los sentidos. Sobre todo con mi putilín Juan Manuel. Cuando me tocó los pechos para ver si eran naturales, tampoco es que me agarró, me tocó un poco para que vea que son naturales. En Israel también lo hice, es una costumbre… pero para que vean que son naturales (risas).

Ciudad

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